Equipo Técnico de Seguridad – Unión Por Todos
9/7/2012
A pesar de la batería de crímenes que ocurren a diario, muchos de ellos de una violencia inusitada, y ante la diversidad de hechos delictuosos que han sido expuestos en los medios en las últimas semanas, como equipo técnico de seguridad de Unión Por Todos no podemos dejar de expresar nuestra preocupación por la inexistencia de una política de seguridad a nivel nacional.
El doble asesinato en Cañuelas, la desaparición de personas -como el caso de María Cash-, los robos a viviendas tan generalizados y cada vez más violentos, las muertes en ocasión de espectáculos deportivos, el homicidio de Nicolás Castillo, por sólo mencionar algunas de las variantes de inseguridad a las que la ciudadanía está expuesta, sumándose a ello las distintas manifestaciones de la población reclamando seguridad así como los resultados de las encuestas de instituciones privadas que constatan el elevado número de ciudadanos que han sido víctimas de algún delito en el último año (alrededor del 30%) y cuán generalizado es el temor a ser, por ejemplo, asaltados, no hacen más que confirmar que lo que es una prioridad para la gente no es en lo más mínimo una prioridad para este Poder Ejecutivo. Tanto es así que ni siquiera en el informe del Jefe de Gabinete en el Congreso de la Nación sobre la marcha general del gobierno se hizo mención alguna a qué está haciendo o piensa hacer el PEN en esta materia.
A pesar de la creación en 2010 del Ministerio de Seguridad de la Nación, al día de hoy brilla por su ausencia el diseño (mucho más la implementación) de una política de Estado en materia de seguridad ciudadana. Únicamente podemos detectar medidas aisladas, que carecen de la integralidad necesaria como para garantizar la seguridad de los habitantes de este país y para lograr una pacificación nacional definitiva.
En Unión por Todos entendemos que el restablecimiento de parámetros aceptables de seguridad implica un trabajo ímprobo e interdisciplinario, en el que se establezcan políticas y estrategias no limitadas a la descripción de problemas sino promotoras de una restauración del tejido social y político, que dé lugar a que la república se convierta en el ámbito en que los ciudadanos puedan vivir una vida plena y feliz.
Propuestas
Nuestras propuestas tienen como ejes:
• Corrección del abandono y ausencia del Estado (“la seguridad se construye desde todas las áreas de gobierno»)
• Reforma institucional y modernización de la Policía Federal Argentina (incluyendo exámenes de confianza, sistema de mérito y profesionalización, auditoría externa) así como de las fuerzas de seguridad federales:
• Lucha frontal contra el narcotráfico, el lavado de activos y los delitos complejos asociados a la narcocriminalidad.
• Régimen de Responsabilidad Penal Juvenil (sistema de tratamiento integral, todas las garantías en los procesos judiciales, necesidad de reparar el daño causado en la medida de lo posible, disposición -en los casos de internación- que ésta sea en establecimientos especializados).
• Gestión de la seguridad pública a nivel local (Estrategias de prevención, Policía comunitaria, Espacios de denuncia “segura”).
• Participación comunitaria efectiva en el diseño, gestión y control de las políticas de seguridad.
• Prevención social de la violencia y el delito (equipos multidisciplinarios ambulantes que atiendan las situaciones “menores” antes de que escalen a episodios de violencia o delito; prevención y educación)
• Control del sistema de seguridad privada (Creación de una agencia de homologación y control de la seguridad privada)
• Acciones para la reinserción social pospenitenciaria real (Medidas para evitar la reincidencia, Incremento de programas de educación y trabajo en cárceles, Desarrollo de programas de reencuentro familiar y reflexión sobre valores).